Espejo decorativo

Todos en nuestra casa tenemos el famoso y "decorativo" cuadro de la luz. Bueno pues vamos a hacer algo para cambiar eso.

En algunos sitios venden cuadros para ocultar el cuadro de la luz, pero nosotros vamos a hacer el nuestro para hacerlo a nuestro gusto y porque por cuestión de espacio, lo que ahí necesitabamos era un espejo con un mueble a modo de recibidor. Y claro está, para que sea distinto a los demás.

Una vez tenemos decidido el diseño nos ponemos manos a la otra. Lo primero que vamos a hacer es medir nuestro cuadro de la luz para a partir de ese momento ponernos a trabajar y a buscar los materiales que nos van a hacer falta.

Nosotros hemos buscado unas piezas de escayola de estilo árabe ya pintadas, pero también podemos pintarlas nosotros mismos. Estas piezas harán el marco del espejo.

También hemos buscado unos listones de madera, un espejo y un tablero de fibra de pan (dm) de 4 o 7mm, unas bisagras de cazoleta, tinte al agua, tapaporos y barniz.

 

Una vez que tenemos  todo el material nos ponemos a trabajar. Cortamos los listones con la ingletadora en piezas de 3.5x3.5cm.

Para cortar el largo vamos a  poner  la ingletadora a 45º y cortamos los listones 4 o 5 cm mas largos que la medida que tomamos de nuestro cuadro de luz para asi asegurarnos que lo tapa entero. Una vez que tenemos cortadas las cuatro piezas nos disponemos a unirlas entre sí formando un rectángulo. Para unirlas podemos hacerlo de distintas formas. Una de ellas es realizar un taladro en el centro del inglete, ponemos un poco de cola blanca y metemos una espiga de madera. Otra forma es poner una escuadra y atornillar los listones entre si. Una vez encolado o atornillado lo dejamos aparte y luego seguiremos con él.

Cogemos otro listón de madera al cual le vamos a realizar un rebaje. Para ello vamos a tomar como referencia la medida de la pieza de escayola que vamos a poner de decoración.

Una vez hemos hecho el rebaje cortamos los extremos a inglete cortándolo 1 cm mas pequeño que la pieza que hicimos anteriormente. También en la parte inferior le vamos a hacer una canal de 4 o 7mm de ancho (dependiendo del tablero que vayamos a poner) y 1 cm de profundidad para meter el tablero de fibra de pan (dm) donde pegaremos el espejo. Así hacemos las otras tres piezas para encolarlas.

Ahora daremos un poco de cola blanca en la ranura que hicimos para meter el tablero de fibra de pan (dm) y pegamos el tablero.

Una vez las tenemos encoladas vamos a hacer los taladros para ponerle unas bisagras de cazoleta. Presentamos las dos piezas. La primera pieza que hicimos, que sera la que sujetaremos a la pared y nos servirá de sujeción. Y la segunda pieza que hemos hecho que será en la que pegaremos las piezas de escayola y en la que pondremos el espejo. Este pieza será la que abramos para poder manipular el cuadro de la luz. Marcamos donde vamos a poner las bisagras y taladremos con una broca de pala . Probamos que encajen perfectamente y que funcionan, y lo desmontamos.

Vamos a coger una lija de grano medio y lijamos lo que ya podemos llamar nuestro marco, porque ya tiene forma.  Limpiamos bien todos los restos de polvo y con una brocha damos una primera mano de tinte. Es importante empezar con una mano bastante clarita de color. Para ello, como el tinte que hemos elegido es al agua, basta con echarle un poquillo de agua  para aclarar el tono. Daremos tantas manos de tinte como sean necesarias hasta llegar al color que nos guste. Entre cada mano lo dejaremos secar. Tras llegar al color que nos gusta vamos a dar una mano de tapaporos para que la ultima mano de barniz no sea tan abundante.

Cuando ya este seco el barniz vamos a pegar el espejo sobre el tablero y las piezas de escayola sobre el marco. Esto ya esta casi terminado solo nos queda poner las bisagras y colgarlo en la pared.

Una vez colocado en su sitio observamos que encaja perfectamente con la decoración de nuestra entrada y que cumple perfectamente con la función por la cual lo hicimos, que era tapar el cuadro de la luz. Esperamos que os guste.

Nos vemos pronto.